El evento fue una muestra del músculo social y la capacidad de organización de la sociedad mexicana.
Por: La Palabra Política.
CDMX, 19 de febrero del 2024.
El pasado domingo 18 de febrero, México fue testigo de un acontecimiento sin precedentes en la historia moderna del país: la «Marcha por la Democracia», un movimiento civil que congregó a miles y miles de ciudadanos en las calles de diversas ciudades mexicanas.
El objetivo de esta marcha, que ha sido denominada como un hito en la lucha por la democracia, fue claro: defender las instituciones que respaldan el sistema democrático mexicano. En un momento de intensa sinergia política y social, los mexicanos demostraron con contundencia que el verdadero poder reside en el pueblo, no en los partidos políticos ni en los actores políticos.
El evento fue una muestra del músculo social y la capacidad de organización de la sociedad mexicana. Liderada por figuras sociales, la marcha contó con la participación de artistas, deportistas, líderes sociales, asociaciones civiles y simpatizantes de diferentes ideologías políticas, todos unidos en un mismo propósito: defender la democracia y las instituciones del país.
Los análisis de diversos medios de comunicación, analistas y profesionales en política coinciden en que la sociedad mexicana está fortalecida y lista para enfrentar cualquier intento de debilitar la democracia en el país. La marcha fue una demostración contundente de que los ciudadanos son quienes tienen el verdadero control y elección para dirigir el rumbo del país.
La «Marcha por la Democracia» fue un acto cívico de gran relevancia, marcado por la voluntad, el amor y el sentimiento de los mexicanos hacia su país. Fue un recordatorio para todos, tanto dentro como fuera de México, de que la sociedad está dispuesta a proteger los intereses y valores fundamentales de la nación, y que ningún partido político, líder o grupo podrá atentar contra el voto ciudadano y las instituciones que garantizan la fortaleza democrática de México.