César Cravioto no es un personaje de paso, es un hombre clave en el presente y futuro político de México.
Por: La Palabra Política.
CDMX, 25 de marzo del 2025.
En la política, hay figuras que brillan con luz propia y otras que, en la discreción del poder, construyen los cimientos de los grandes movimientos. César Cravioto Romero pertenece a esta última categoría. Secretario de Gobierno de la Ciudad de México y mano derecha de la jefa de gobierno Clara Brugada Molina, su papel no solo es clave en la gobernabilidad de la capital del país, sino en la consolidación del segundo piso de la Cuarta Transformación (4T).
Su trayectoria lo ha convertido en un estratega con experiencia, un operador con lealtad inquebrantable y un formador de cuadros políticos con profundo compromiso ideológico. César Cravioto no es un improvisado, es un constructor de movimiento, un personaje que ha estado en las entrañas de MORENA desde su génesis y que ha sabido navegar entre las tormentas del poder con firmeza y convicción.
Hoy, su papel en la administración de Clara Brugada es fundamental: ser el puente entre el gobierno y las distintas fuerzas políticas, contener la presión opositora, garantizar la estabilidad en la capital y seguir fortaleciendo el proyecto de la 4T que inició Andrés Manuel López Obrador.

El Formador de un Grupo Político Sólido.
Desde su paso por el Senado de la República y su rol como Comisionado para la Reconstrucción de la CDMX tras el sismo de 2017, César Cravioto se ha consolidado como un operador político de primer nivel. Ha sido una pieza clave en la construcción de un grupo político que no solo tiene estructura, sino visión, disciplina y compromiso con el obradorismo.
Su liderazgo ha sido fundamental para la formación de una base sólida dentro de MORENA en la Ciudad de México. No es un político de ocurrencias ni de protagonismos vacíos; es un operador meticuloso, con conocimiento profundo del movimiento y con una clara capacidad de articulación política.
En un escenario donde la lucha por el control de la CDMX es intensa y donde la oposición busca recuperar terreno, la presencia de César Cravioto en el gobierno de Clara Brugada es una garantía de estabilidad y continuidad del proyecto de transformación.

César Cravioto y el Segundo Piso de la 4T en la CDMX.
La llegada de Clara Brugada al gobierno capitalino no solo representa una transición en el liderazgo de la 4T en la ciudad, sino una nueva etapa de consolidación. La continuidad no se da por decreto, se construye, y esa es la misión de César Cravioto.
El obradorismo ha dejado claro que la Ciudad de México es su bastión, el corazón político de la transformación nacional. Pero para mantenerlo, se necesita un liderazgo sólido, una estrategia clara y operadores de peso que entiendan la dinámica del poder y la política de territorio.
Ahí es donde Cravioto se convierte en una pieza clave. Su papel no solo es el de un secretario de gobierno tradicional, sino el de un articulador político, un negociador, un estratega que entiende el ADN de la Cuarta Transformación y que sabe cómo navegar en un entorno político cada vez más complejo.
La gobernabilidad en la CDMX no es un tema menor. En una ciudad con alta efervescencia social, con movimientos políticos diversos y con una oposición que no cede, el rol de Cravioto es fundamental para evitar crisis, construir acuerdos y garantizar la estabilidad política en la capital.

Un Hombre de Confianza para Clara Brugada y el Movimiento.
Si hay algo que define a César Cravioto es su lealtad y disciplina política. No es un personaje que se mueve por intereses personales, sino por la convicción de fortalecer el movimiento que construyó Andrés Manuel López Obrador.
Esa lealtad ha sido clave para que Clara Brugada le haya otorgado una de las posiciones más sensibles de su gobierno. No cualquiera es Secretario de Gobierno de la CDMX; se necesita carácter, temple, capacidad de negociación y profundo conocimiento político.
Cravioto no solo cumple con esos requisitos, los supera. Su relación con Clara Brugada es de confianza absoluta, y esa confianza se traduce en un margen de maniobra que le permite ejercer el poder con claridad de rumbo y con plena convicción de fortalecer la 4T en la capital.

El Futuro del Movimiento en la CDMX.
La Ciudad de México ha sido, históricamente, un laboratorio político. Lo que sucede en la capital marca el rumbo del país. Y en ese escenario, César Cravioto no es solo un secretario de gobierno, es un arquitecto del futuro del movimiento.
Su presencia en el gobierno de Clara Brugada no solo es una señal de continuidad, sino una declaración de intenciones: la 4T en la CDMX no se va a debilitar, se va a consolidar.
Su capacidad de operación, su conocimiento del movimiento y su lealtad a los principios obradoristas lo convierten en una de las piezas más importantes en la construcción del segundo piso de la Cuarta Transformación en la capital.
César Cravioto no es un personaje de paso, es un hombre clave en el presente y futuro de la política en la Ciudad de México. Y en la batalla por la consolidación de la 4T, su papel será determinante.